En la mañana de este lunes se producía el fallecimiento del Papa Francisco, en torno a las 07:35 horas, y desde su nombramiento en marzo de 2013 ha habido dos decisiones suyas que han regido el destino espiritual de Albacete, su provincia y su diócesis. Se trata en concreto de las elecciones de Ángel Fernández Collado y Ángel Román Idígoras como obispos de la diócesis albaceteña.
Ángel Fernández Collado, nombrado obispo de Albacete por el Papa Francisco
Fue en septiembre de 2018 cuando el Papa Francisco tomó la decisión de nombrar nuevo obispo de Albacete a monseñor Ángel Fernández Collado, quien hasta entonces era obispo auxiliar de Toledo. Francisco aceptaba así la renuncia al gobierno pastoral de esta diócesis presentada por monseñor Ciriaco Benavente Mateos.

Ángel Román Idígoras, nombrado obispo de Albacete por el Papa Francisco
Ha sido hace escasas fechas, concretamente el pasado 6 de marzo, cuando se conoció la decisión del Papa Francisco de nombrar obispo electo de la diócesis de Albacete al sacerdote madrileño Ángel Román Idígoras, quien en mayo será ordenado obispo de manera oficial y sucederá en el cargo al propio Fernández Collado, cuya renuncia por motivos de salud fue aceptada por el Papa Francisco el 9 de abril de 2024.

Desde entonces y hasta que sea ordenado Román Idígoras, Julián Ros ha sido el Administrador Diocesano de la Diócesis de Albacete.