Un bailaor flamenco de Albacete con mucho duende

El bailaor albaceteño Miguel de Luis comenzó a bailar con 3 años

Miguel de Luis es un joven bailaor de Albacete, virtuoso del zapateo, que empezó a bailar con 3 años, y cuya carrera profesional comenzó cuando tenía 6. Fue el primer estudiante gitano que terminó el conservatorio de danza, algo que le ha servido para pasear su arte por toda España, y por algunas ciudades del extranjero. 

Hijo de Luis Miguel y Piedad, y mayor de cuatro hermanos, Miguel de Luis comenzó a bailar cuando solo tenía 3 años. “Aunque nadie de mi familia bailaba, mi casa respiraba flamenco por todos los rincones. Mi padre ha tenido una tienda de ropa, y se ha dedicado toda la vida al mercadillo, pero su pasión siempre ha sido el flamenco, y eso se notaba en el ambiente. Cuando era muy pequeño siempre me ponía videos de bailaores y bailaoras, y me explicaba técnicas del baile, y de este modo, a los 3 años empecé a dar mis primeros pasos”, señala. 

Miguel de Luis en clase con Sara ‘La Canelilla’/ Foto cedida

Su encuentro con Sara ‘La Canelilla’

Piedad ‘La Morena’, madre del bailaor, vio algo en la forma de bailar de Miguel. “Cuando cumplí los 6 años mi madre estaba como loca buscando una academia de baile en Albacete para apuntarme a bailar. Buscando y buscando dió con una profesora sevillana de baile flamenco que en ese momento estaba viviendo en Albacete, y así fue como conocí a Sara ‘La Canelilla’, que se convertiría en una de las personas más influyentes en mi carrera profesional.  Comencé a dar clases con ella, y cuando mi madre fue a pagar la academia, Sara le dijo que no le iba a cobrar, porque había visto que tenía duende y quería sacar lo mejor de mí. Empecé a dar clase con ella a los 6 años, y estuve hasta los 12, y nunca cobró nada, porque siempre ha creído en mí, y por eso le estoy muy agradecido”, indica. 

Miguel de Luis actuando con 10 años/ Foto cedida

Conservatorio Profesional de Danza

Cuando Luis Miguel cumplió los 12 años, Sara ‘La Canelilla’ dejó Albacete, y volvió a Sevilla por motivos personales. “En ese momento no sabía qué hacer, porque con ella lo había aprendido todo, y el flamenco que había traído de Sevilla era muy puro, diferente al que se estaba enseñando en las academias de la ciudad, que eran de corte más estilizado y clásico. Fue entonces cuando me dijo que me iba a preparar para las pruebas de acceso al Conservatorio de Danza.  Así que nos pusimos con ello, realicé la prueba de acceso, la superé con éxito, y así empezó mi aventura en el Conservatorio Profesional de Danza de Albacete, donde estuve otros 6 años, hasta que los terminé con 18”, refleja. 

Miguel de Luis/ Foto cedida

En el conservatorio aprendió danza clásica, aunque se especializó en danza española. “Estudiar danza clásica fue una experiencia muy buena, aunque era todo nuevo para mí. No me había puesto unas mallas en mi vida, pero poco a poco me fui acostumbrando.  Cuando cursaba segundo en el Conservatorio, mi profesora de clásico, Charo Lara, me dijo que en danza española iba muy bien, porque era lo mío, y tenía las cualidades innatas, pero me animaba a especializarme en clásico, porque veía que podía sacar mucho de mí y podría convertirme en un bailarín completo, ya que tenía condiciones para serlo. Esto es algo que agradecí mucho, porque me animó y me dio alas para seguir, pero finalmente seguí con mi idea de apostar por el flamenco, que es lo que siempre me ha gustado”, reconoce. 

Miguel de Luis actuando/ Foto cedida

Actuaciones en París

Con tan solo 12 años, Miguel de Luis tuvo la oportunidad de actuar en París. “Era mi primer año en el conservatorio, cuando Sara ‘La Canelilla’ me llamó para que actuara con su compañía en un espectáculo que presentaba en el Teatro ‘Aleph’ de París. Recuerdo que no pude actuar en la gala de fin de curso del conservatorio porque estaba en París, pero la verdad es que valió la pena. Dos años después, cuando tenía 14 años, volví a París a actuar en el mismo teatro, con la compañía de baile de Sara de nuevo.  Al terminar el conservatorio quería seguir formándome en el extranjero, pero no tenía muchos medios económicos, así que encaucé mi carrera por otro lado. Me empezaron a llamar de varias compañías para actuar en teatros, iba mucho a Sevilla, y en Albacete daba clases en barrios, academias y asociaciones, como en La Casa de Andalucía de Albacete. Hasta que, hace dos años, superé con éxito unas pruebas de la Escuela de Música y Danza de Campo de Criptana, y me fui a trabajar como profesor y coordinador de la escuela, algo que fui compaginando con las actuaciones, y con mi formación”, explica. 

Miguel de Luis en el Theatre Aleph (París)/ Foto cedida

Ahora, dos años después, a sus 23 años, Miguel de Luis ha logrado uno de sus sueños, abrir su propia academia de baile, en el centro comercial ‘Albacenter’. “Estoy muy contento porque me va muy bien. Tengo bastantes alumnas, y en un futuro me gustaría, además, crear con ellas mi propia compañía de baile. Ahora tengo una emoción muy grande, porque ‘La Farruca’ viene a mi academia a impartir unas clases magistrales, y para mí es todo un honor. Y es que, ‘Los Farrucos’, y en especial ‘Farruquito’, han sido siempre mi referente en el mundo del baile flamenco”, concluye. ‘La Farruca’ impartirá clases de flamenco los días 11 y 12 de abril, en la ‘Escuela Miguel de Luis’ (Sala Activity- Centro Comercial Albacenter).

Modesto Colorado

Comunicador y cantante de Albacete. Más de 20 años de experiencia en medios de comunicación, especializado en información y reportajes de ámbito cultural.
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