Tal y como publica Infobae, el Tribunal Supremo ha condenado a la empresa Quirón Prevención a readmitir a una empleada que fue despedida tras estar de baja por un cáncer de endometrio, y después por un trastorno depresivo.
Tras el proceso judicial, el Tribunal Supremo ha condenado a esta empresa a readmitir a la trabajadora y a responder con una indemnización de 12.000 euros por daños morales, además de abonar los salarios que dejó de percibir desde su despido, en junio de 2023, a 126 euros el día.
De este modo, el Supremo ha desestimado el recurso interpuesto por Quirón Prevención contra la sentencia publicada en marzo de 2024, en la que el Tribunal Superior de Justicia declaró como nulo el despido de esta empleada.
La empleada estuvo de baja por cáncer y depresión
Además, la Sala argumentó que dicho despido suponía “una actuación discriminatoria por estar relacionado con una discapacidad equiparable, derivada de la prolongada baja médica de la trabajadora”, y manifestó que la empresa “no adoptó medidas para adaptar el puesto de trabajo en lo posible”.
En lo relacionado al despido de la trabajadora, Quirón Prevención argumentó que la empleada fue declarada “como no apta para su puesto de trabajo en el informe médico del servicio, al identificar limitaciones tales como la imposibilidad de realizar tareas como conducción de vehículos, esfuerzos intensos o trabajos con altos requerimientos intelectuales”, afirmando que las limitaciones físicas de la trabajadora “afectaban al 80% de las tareas de su puesto”.
Finalmente, el Tribunal Supremo ha condenado a la empresa y obliga a Quirón Prevención a readmitir a la empleada, además de responder con una indemnización y abonarle los salarios que dejó de percibir tras su despido.
