Profesionales de clínicas veterinarias se concentraban en la puerta del Colegio de Veterinarios de Albacete como protesta por la aplicación del Real Decreto 666/2023 impuesto por el Ministerio de Agricultura y Ganadería.
Este paro parcial en la actividad de las clínicas de veterinarios de la provincia, unida a esta concentración, tenía lugar en la mañana de este martes, 11 de febrero, ante el malestar de estos profesionales por la aplicación de esta nueva normativa impuesta por el Gobierno de Pedro Sánchez. Concretamente, estos centros veterinarios permanecían cerrados de 11:00 horas a 12:00 horas en señal de protesta.
Consideraban que tanto las clínicas como los centros veterinarios de toda la provincia de Albacete “somos víctimas de una vejación hiperregulatoria”, confirmando que esta nueva normativa “afecta negativamente” a la actividad que desarrollan a diario estos profesionales veterinarios”. Igualmente, ponían de relieve que la aplicación de este Real Decreto “elevará innecesariamente los costes de nuestros servicios para los propietarios de mascotas”.
De este modo, defendían la libertad de criterio clínico y la reducción de una mayor carga burocrática. Emilio Lozano, veterinario clínico en Albacete, explicaba que “lo que estamos reivindicando es que el Gobierno derogue el Real Decreto 666/2023 que entró en vigor el día 2 de enero”, considerando que “coarta totalmente nuestra libertad como clínicos para ejercer nuestra profesión”. En este punto, detallaba el veterinario que “encasilla completamente los tratamientos que tenemos que realizar en la práctica clínica diaria”.
Al respecto, desarrollaba Emilio Lozano que, “por un lado, acota los antibióticos que tenemos que utilizar y nos obliga a entrar directamente en unas categorías de antibióticos que sabemos que no van a funcionar”, asegurando que esto “prolonga innecesariamente los tiempos de espera para poder tratar adecuadamente a los animales y pone en peligro a las mascotas”.
Pero más allá de lo que al suministro de antibióticos se refiere, exponía este veterinario clínico que el nuevo Real Decreto impuesto por el Ministerio de Agricultura “nos obliga a tratar ajustándonos a las fichas técnicas de los medicamentos”. En este punto, argumentaba que muchas de estas fichas técnicas “están completamente obsoletas y no recogen en absoluto las evoluciones científicas de los últimos años”. De manera que “si un fármaco está registrado para una sola indicación desde hace 25 años y en estos años han salido estudios científicos que demuestran que se puede utilizar en otras especies, en otras dosis, o en otras patologías, la ley, tal y como está ahora mismo, nos impide hacer uso de ese medicamento para aplicarlo de esa manera y nos tenemos que ceñir a lo que pone en el prospecto”, explicaba Emilio Lozano, adelantando que “esto, evidentemente, va en contra totalmente de nuestro ejercicio como veterinarios clínicos y coarta nuestra libertad para poder ejercer nuestra profesión de acuerdo a los estudios, a la formación que tenemos y a las evidencias científicas de las que disponemos”.
“Por todo esto y porque va a causar un gran sufrimiento a las mascotas y nos va a perjudicar en nuestro trabajo, pedimos que este Real Decreto se derogue”, ponía de relieve este profesional en Albacete. Pero además, confesaba que los veterinarios clínicos “estamos hasta arriba de que esta profesión esté tan denigrada, humillada y no sea tenida en cuenta de ninguna manera”. De este modo, advertía que “ninguno de los que estamos aquí estamos dispuestos a consentir que un animal paciente nuestro acabe en el hoyo por seguir estas indicaciones tan poco científicas que nos imponen”.
Los veterinarios de Albacete se enfrentan a multas superiores al millón de euros
Pero más allá de estas imposiciones a nivel de criterio clínico, desvelaban estos profesionales que se enfrentan a multas que podrían superar el millón de euros en el caso de no cumplir con las indicaciones contempladas en el Real Decreto 666/2023. Al respecto, trasladaba Emilio Lozano que las sanciones que contempla esta legislación “son totalmente abusivas”.
Al respecto, detallaba este veterinario de Albacete que “la ley nos obliga a comunicar de forma periódica al Ministerio todos los antibióticos que gastamos a diario, hasta la última gota”, apuntando que “por el simple hecho de olvidarnos, no trasladar esto o que no coincida con los gastos que hemos hecho de antibióticos, colirios o medicamentos inyectables, nos puede suponer multas desde 6.000 hasta 1,2 millones de euros”.
“Es una locura”, reflexionaba este profesional sobre las elevadas sanciones económicas a las que podrían enfrentaras los veterinarios. En este punto, puntualizaba que “hay gente que ha atropellado a personas y las ha abandonado y ha pagado una menor multa”.
Una legislación que adelantaban estos profesionales “también va a hacer que los clientes tengan que venir con sus mascotas más veces al veterinario”. Concretamente, explicaba Emilio Lozano que “si nosotros tenemos que empezar a tratar a un animal con un antibiótico que sabemos que no funciona, va a tener que volver y luego si tenemos que hacer más pruebas, pues todo esto va a repercutir en que los precios, evidentemente tendrán que subir”, suponiendo un mayor coste para los propietarios de animales en Albacete.
Además, ponía de relieve este veterinario que “toda la burocracia que nos impone la ley nos va a restar tiempo de trabajo”, por lo que “si en vez de pasar una hora de consulta la tenemos que invertir sentados en el ordenador haciendo papeles, no queda otra que repercutirlo en los precios”.
Propietarios de mascotas también se suman a esta concentración en Albacete.
Una concentración en Albacete a la que también se han querido sumar propietarios de mascotas, quienes se han sumado para mostrar su apoyo a los veterinarios y poner de relieve que esta medida también afecta de lleno al cuidado de sus animales. “Les apoyamos porque llevan toda la razón del mundo”, manifestaba Josefina, vecina de Albacete que decidía acudir a esta concentración junto a una de sus mascotas. De este modo, confirmaba que “estoy a favor de los veterinarios como propietaria de perros y de ganado”, quien pedía “evitar esta medida antes de llegar a padecerla de verdad”.
Por su parte Luisa, otra propietaria de animales también apoyaba al sector veterinario de Albacete en esta protesta, trasladando que “esta ley redunda en contra de los animales y de los dueños”. Al respecto, explicaba que “tenemos que pagar un 21% del IVA y ahora nos va a suponer un mayor gasto ir a la consulta cada vez que el animal se nos ponga enfermo”, confesando esta albaceteña que “los que tenemos mascotas nos estamos echando a temblar, porque no sabemos cómo vamos a salir adelante con tanto gasto”.
Más allá de esto, consideraba que con la entrada en vigor de esta normativa “los animales están desprotegidos porque los veterinarios no van a poder atenderlos como ellos quieren y como queremos nosotros”. De este modo, esperaba que quienes han dado luz verde a este Real Decreto “piensen un poco y modifiquen, cambien o, si fuera necesario, eliminarlo y empezar de cero”, subrayando que “estamos indignados”.
/Fotos: Miguel Ángel Romero/
