El día 17 de septiembre, los aficionados taurinos se quedaron sin ver los toros de Victorino en la Plaza de Toros de Albacete al ser suspendida la corrida por la lluvia.
Sin embargo, la suspensión quizá podría haberse evitado de haber querido poner los medios para evitarlo, algo que no se hizo, ya que en ningún momento se puso la lona para que el albero no quedara impracticable por la lluvia.
Dicha omisión puede que sea también constitutiva de un posible incumplimiento del pliego de condiciones que la empresa arrendataria debe cumplir, ya que el citado pliego recoge los siguiente al respecto:
Como es sabido por todos, la empresa UTE Casas – Amador no puso en ningún momento la lona a pesar de que las previsiones de la AEMET daban claramente lluvias en los momentos previos al festejo, teniendo que ser la corrida suspendida sin paliativos por el mal estado del ruedo. La previsión de la AEMET para aquel día era la siguiente:
Obviamente, es de perogrullo decir que no se pusieron todos los recursos posibles para evitar que el final fuera la suspensión, ya que la empresa, a pesar de que el pliego indica que debe hacerlo, en ningún momento colocó la lona protectora para evitar que pasara lo que pasó y el ruedo se convirtiera en un barrizal y el peligro para la integridad de los toreros fuera patente en cada centímetro cuadrado de superficie.
La suspensión de la corrida por no poner la lona generó muchas críticas de la afición hacia la empresa UTE Casas – Amador.
