El Juzgado de lo Penal número 3 de Albacete tiene previsto juzgar el próximo jueves, 16 de septiembre, a un hombre acusado de agredir sexualmente a una mujer a la que ofreció su casa para que cargara el teléfono móvil, amenazándola cuando esta se negó, hechos que la Fiscalía considera que son constitutivos de un delito de agresión sexual por el que pide la pena de tres años de prisión y tres años de libertad vigilada, así como la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 200 metros durante cuatro años.
Según el escrito de acusación, al que ha tenido acceso El Digital de Albacete, los hechos tuvieron lugar sobre las 6.35 horas del 4 de abril de 2018, cuando el acusado, de nacionalidad rumana, se acercó a su víctima que se encontraba en una cabina intentando llamar, y le ofreció su casa para poder cargar el teléfono.
Una vez en la vivienda, mientras el móvil cargaba, el procesado comenzó presuntamente a realizar tocamientos en los muslos y el pecho a la mujer, diciéndole, según la acusación, «vamos a jugar un poco». Esta se negó, a lo que el acusado. respondió «nada es gratis», impidiéndole salir de la habitación. Fue entonces cuando el acusado, según Fiscalía, la agarró del pelo y la lanzó contra la pared mientras le profería insultos racistas como «puta colombiana, tú que te crees».
En ese momento, la víctoma comenzó a patear la puerta pidiendo ayuda, apareciendo en la habitación el compañero de piso del acusado, quien la ayudó a salir del domicilio.
Según prosigue el escrito de acusación, la víctima acudió al bar más cercano desde donde llamó a la Policía, siendo perseguida por el acusado, que fue hasta el mismo local para devolverle el móvil al tiempo que la amenazaba, asegurándole que «si tú me denuncias yo voy a salir y te vas a arrepentir».
Además, momentos previos a la agresión, el acusado aprovechó para robar 20 euros en efectivo y un décimo de lotería que portaba la mujer en el bolso.
El Ministerio Fiscal también solicita la pena de dos meses de multa con cuota diaria de 12 euros por el delito leve de lesiones. Misma pena que pide por el delito leve de amenazas y por el delito leve de hurto.
El acusado, además, debería indemnizar a la víctima en la cantidad de 300 euros por las lesiones, 20 euros por el dinero sustraído y en 1.000 euros por los daños morales.
Por otro lado, el acusado también deberá pagar 349,82 euros al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) por la asistencia médica prestada.
